Las Ideas del despertar liberal de izquierda [incluido el marxismo] son "niveles inferiores de conciencia" son una enfermedad de la moral ya que creen en el relativismo, negación de Dios y las patologías normalizadoras como la pedofilia, "permitiendo actuar a partir de instintos animales racionalizados" [que también vemos en los fetiches sexuales patológicos que se han normalizado, incluidas las identificaciones de género no binarias, BDSM ... también vemos que se ha infiltrado en la industria de la música y el entretenimiento [Hollywood]., Incluso hasta las prácticas neo-tántricas de la Nueva Era donde el instinto sexual hedonista / animalista / adicción sexual [la mayoría de las veces debido a apegos de entidades ocultas, dado que la mayoría de las personas no se preguntan de dónde vienen sus impulsos sexuales, para empezar] se disfraza de "espiritualidad" o "sexo sagrado", etc.], .... que cada decisión es simplemente "una cuestión de sentimiento personal" ya que "no existe una definición absoluta de lo que está bien y lo que está mal, sólo lo que usted percibe como correcto e incorrecto". También se relaciona con la falacia de que sólo existe "mi" o "tu" verdad y cómo estas ideas se han infiltrado en las universidades, etc .
En los niveles más bajos de conciencia, la mente se usa simplemente como otra arma para imponer posiciones, controlar a otros y permitir la actuación de instintos animales racionalizados. La razón del intelecto puede distorsionarse como retórica para servir objetivos emocionales y egoístas en lugar de que aquellos que son íntegros (por ejemplo, las filosofías del relativismo o el marxismo) . La distorsión de la verdad para servir a agendas posicionales es característica de la Mente Inferior (ego) en lugar de la Mente Superior. La mente inferior sustituye la intelectualización narcisista por la dialéctica disciplinada de la verdad lógica. El mejor ejemplo es el declive en el nivel académico como consecuencia de las incursiones corrosivas del "relativismo moral": El relativismo moral es la creencia de que definir el bien y el mal es una elección individual y personal. Negando la presencia de la ley absoluta, esta ideología enseña que cada decisión es una cuestión de sentimiento personal. El relativismo moral significa que el adulterio, por ejemplo, no es objetivamente incorrecto. Si bien puedo creer que el adulterio está mal y que destruye los matrimonios, usted tiene derecho a creer que está bien y fortalece el matrimonio. El mismo razonamiento se aplica al asesinato, el robo, la pedofilia y cualquier otra faceta de la vida humana. Con esta ideología, no existe una definición absoluta de lo que está bien y lo que está mal, sólo lo que usted percibe como correcto e incorrecto.
Este principio distorsionado ha hecho grandes avances en nuestras universidades. Creado por laicistas, el relativismo moral es un subproducto de la teoría evolucionista, que impregna la cultura universitaria, especialmente las ciencias. Al negar la existencia de Dios, la teoría de la evolución sembró las semillas del relativismo moral. Si no hay Dios, razonan los secularistas, entonces no hay ley absoluta. Usando el relativismo moral como su arma, los secularistas liberales pueden destruir cualquier ley absoluta que deseen. Incluso las leyes que gobiernan la sociedad pueden destruirse. La mayoría de la gente reconoce que la ley, la ideología y la moral se rigen esencialmente por la creencia judeocristiana en los Diez Mandamientos. Dado que no hay Dios, según los secularistas, entonces todo lo que tenemos son diez Sugerencias; no hay ley. Sin leyes absolutas, definir el bien y el mal es un asunto estrictamente personal. Si una persona no cree en la ley absoluta, no se le exige que crea que la pedofilia está mal. El relativismo moral destruye la ley que define el bien y el mal, lo moral y lo inmoral. Estos son algunos ejemplos de la inmoralidad y el relativismo moral que invaden nuestras universidades. La idea de que es responsabilidad del individuo decidir lo que está bien y lo que está mal está firmemente arraigada en la mente de los estudiantes universitarios de hoy .